Pastor Luis del
Cid, Chimaltenango 29 de mayo de 2,012 año de la Libertad
Introducción
La Palabra de
Dios nos muestra que muchas cosas deben ser perfeccionadas en nosotros, una de
estas es el amor:
1Jn 4:18 En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el
temor, porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido
perfeccionado en el amor.
Claramente
vemos que el amor tiene que evolucionar hasta llegar a ser perfecto. En este
tema nos enfocaremos especialmente a ver cómo avanzar hacia un amor perfecto en
el matrimonio, para ello regresemos a ver el Génesis de nuestra creación:
Gén 2:23 Dijo entonces Adán: «¡Esta sí que es hueso de mis huesos y carne
de mi carne! Será llamada “Mujer”, porque del hombre fue tomada».
Hemos explicado
que cuando la Biblia habla de huesos, está haciendo referencia al Espíritu,
ejemplo:
Eze 37:5 Así ha dicho Jehová, el Señor, a estos huesos: Yo hago entrar
espíritu en vosotros, y viviréis.
De allí que
Adán estaba diciendo: “esta es espíritu de mi espíritu y naturaleza de mi
naturaleza”. Cuando hablamos de la perfección del amor estamos hablando de la
perfección de algo que es espíritu, pues dice la Biblia:
2Ti 1:7 porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de... amor...
Sintetizando lo
que queremos poner como cimiento en esta enseñanza es que el amor tiene que
evolucionar para llegar a ser un vínculo espiritual perfecto y así alcancemos
plenamente el plan de Dios en el matrimonio. Si un matrimonio tiene un perfecto
amor, entonces será un matrimonio poderosísimo porque habrán llegado a ser uno
solo, de tal manera que se cumplirá el principio de la potencialización de la
unidad y por lo tanto será una familia poderosa en Dios. Cuando hay un buen
matrimonio hay una familia sólida. ¿Cómo hacemos para que evolucionemos hacia
la perfección del amor? Recuerde, el amor tiene que llegar a ser un perfecto espíritu.
1Co 15:44 se siembra un cuerpo natural, se resucita un cuerpo espiritual.
Si hay un cuerpo natural, hay también un cuerpo espiritual.
Si quiero
alcanzar el espíritu perfecto del amor, necesito sembrar primero lo natural
para cosechar lo espiritual, o dicho de otra forma: si quiero alcanzar la
plenitud en mi matrimonio necesito sembrar lo natural para cosechar lo
perfecto. La palabra natural que aparece aquí y que tenemos que sembrar viene
del griego psujikós y también significa: Sensitivo: relativo a
las sensaciones producidas en los sentidos y especialmente en la piel. Esto
quiere decir que cuando no se siembra lo sensitivo, es decir el principio
terrenal que a una acción una reacción, no se puede crecer hacia el amor
perfecto.
Ejemplo: muchas relaciones matrimoniales se basan en la satisfacción
sexual, antes del acto se sienten atraídos, enamorados etcétera pero solo pasa
el momento y todo cambia hacia la incomprensión, ¿por qué? porque no sembraron
lo natural primero, es decir no dejaron momentáneamente lo terrenal para buscar
primero la unidad espiritual para que luego se concluyera en lo natural. Hay
una planta que así es llamada "sensitiva", llena de aguijones
ganchosos, original de América Central. Si se le toca, se dobla hasta parecer
que se marchitó pero después de un tiempo vuelve a su estado normal. Así hay
cristianos, que tienen aguijones ganchosos, que están siempre a la defensiva,
que responden a una acción con una reacción almática, que si prevalecen, el
otro se amedrenta pero si los dominan parece que quieren morirse, pero solo
pasa un tiempo y vuelven a "su estado natural" que no los deja
evolucionar al perfecto amor. Natural del griego Psujikos que también significa
alma: principio que da vida e instinto a los animales. En el
sentido que hoy vemos necesitamos sembrar nuestras emociones, morir a estas
para que entonces cosechemos una vida guiada no por el alma sino por el
espíritu, por eso dice la Biblia:
1Co 15:37 Y lo que siembras no es el cuerpo que ha de salir, sino el grano
desnudo, sea de trigo o de otro grano.
Ese grano
desnudo es el alma sincera que solo se puede sembrar si hay humildad y
honestidad para ver lo que no sirve y así sembrarlo para que muera:
Jua 12:24 De cierto, de cierto os digo que si el grano de trigo que cae en
la tierra no muere, queda solo, pero si muere, lleva mucho fruto.
Jua 12:25 El que ama su vida, la perderá; y el que odia su vida en este
mundo, para vida eterna la guardará.
La palabra vida
que aparece aquí también se puede traducir desde el griego como alma. Si no
estamos dispuestos a sembrar nuestras emociones, sentimentalismos o arrebatos
no podremos alcanzar la perfección del amor. Por eso algunas versiones traducen
de la siguiente forma:
1Co 15:44 Se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual. Hay
cuerpo animal y hay cuerpo espiritual.
Los animales se
mueven instintivamente, los humanos sin Cristo también, pero el que está en
Cristo NUEVA CRIATURA ES:
2Co 5:17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas
viejas pasaron; todas son hechas nuevas.
LBD 2Co 5:17 Al volverse cristiano, uno se convierte en una persona
totalmente diferente. Deja de ser el de antes. ¡Surge una nueva vida!
Dijimos que esa
palabra animal o natural viene del griego psujikós pero según los eruditos
bíblicos, el alma como vitalidad (es decir como una fuerza) equivale a las
siguientes tres palabras hebreas: Néfesh h5315: anhelar, deseo, estómago,
voluntad.
Recuerde que
estamos viendo como sembrar lo natural para cosechar la perfección espiritual.
Basándonos en estos conceptos vemos que en el matrimonio será necesario sembrar
anhelos, deseos y a veces el querer hacer nuestra voluntad. Dice la Biblia:
Flp 3:18 Porque muchos andan por ahí, de quienes os hablaba muchas veces, y
ahora hasta lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo.
Flp 3:19 El fin de ellos será la perdición; su dios es su estómago; su
gloria se halla en su vergüenza; y piensan solamente en lo terrenal.
Para sembrar lo
almático, hay que deponer la satisfacción de nuestros propios deseos como
prioridad, para buscar la satisfacción de nuestro cónyuge primeramente aún en
la intimidad sexual:
1Co 7:2 Sin embargo, por causa de las fornicaciones tenga cada uno su
propia mujer, y tenga cada una su propio marido.
1Co 7:3 El marido debe cumplir con su mujer el deber conyugal, y asimismo
la mujer con su marido.
1Co 7:4 La mujer no tiene dominio sobre su propio cuerpo, sino el marido;
ni tampoco tiene el marido dominio sobre su propio cuerpo, sino la mujer.
A más de esto
hay que dejar de pensar solamente en lo terrenal para poder recibir la
revelación de lo espiritual. Quien no lo hace es enemigo de la cruz de Cristo,
es decir no vive el evangelio porque este evangelio es morir para poder
resucitar a nueva forma de vida. Lo que nos da la fuerza:
Gén 32:30 Jacob llamó Peniel a aquel lugar, porque dijo: «Vi a Dios cara a
cara, y fue librada mi alma».
Para poder
morir a lo almático se necesita la llenura de Dios y para conseguirlo hay que
buscarlo con constancia y esfuerzo.
Jer 38:20 Dijo Jeremías: –No te entregarán. Oye ahora la voz de Jehová que
yo te hablo, y te irá bien y vivirás.
Si Dios nos
hablara directamente seguro que haríamos más fácilmente caso, pero muchas veces
no tomamos en cuenta lo que Dios nos dice porque lo hace a través de siervos
que tienen son como nosotros. Un matrimonio que se deja pastorear, que cuando
hay que reconocer algo incorrecto se sujeta a la instrucción pastoral es un
matrimonio que morirá a lo almático y por tanto le irá bien.
Lam 3:25 Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que lo busca.
Lam 3:26 Bueno es esperar en silencio la salvación de Jehová.
Quien busca a
Dios y sabe esperar cuando ya no se puede hacer más por el cónyuge, estará
sembrando su alma y Dios se encargará de lo demás a favor de él, por eso
esperar en Dios sin protestar es bueno.
Ruakj h7307:
Significa ira, enojo, tempestuoso.
Efe 4:26 AIRAOS, PERO NO PEQUEIS; no se ponga el sol sobre vuestro enojo,
Efe 4:27 ni deis oportunidad al diablo.
Para sembrar el
alma hay que tener claro que inevitablemente habrá momentos de molestia pero la
clave es no pecar, no reaccionar conforme a las emociones del alma sino
conforme al espíritu, por eso nos aconseja el Señor:
Stg 1:19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oir,
tardo para hablar, tardo para airarse,
Claramente dice
que no nos enojemos fácil ni rápidamente, sino que hagamos el esfuerzo porque
tenga que darse muchas cosas para llegar a enojarnos.
Isa 33:11 Concebisteis hojarascas, rastrojo daréis a luz; el soplo de
vuestro fuego os consumirá.
La palabra
soplo se puede traducir desde el hebreo como alma. Lo que dice es que quien
acumula cosas que no sirven, cosas vanas, su misma alma se encargará de
consumirlo. Entiéndase recuerdos, falta de perdón o rencores que en un momento
de ira serán el combustible para que venga mayor destrucción.
Kjai h2416:
crudo (carne viva), bestia, silvestre. Necesitamos sembrar lo tosco, lo que ha
crecido sin enseñanza y que muchas veces nos lleva a conducirnos carnalmente.
Aquí se encierran muchos aspectos como el trato entre del uno al otro.
1Ts 2:7 Antes bien, nos portamos con ternura entre vosotros, como cuida una
madre con amor a sus propios hijos.
1Pe 3:7 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando
honor a la mujer como a vaso más frágil ...
1Pe 3:1 Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos...
1Pe 3:2 al observar su conducta íntegra y respetuosa.
1Pe 3:4 Que su belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo
íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Ésta sí que tiene mucho valor delante de Dios.