Introducción
En la palabra de Dios aparecen varios ejemplos donde entendemos que mucho de lo que entre a nuestras casas dependerá de cómo los papás hagamos nuestra función de guardias. Miremos un ejemplo:
Hch 16:26 Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.
Hch 16:27 Se despertó el carcelero y, al ver abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada y se iba a matar, pensando que los presos habían huido.
Hch 16:29 Él entonces pidió una luz, se precipitó adentro y, temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas.
Hch 16:30 Los sacó y les dijo: –Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?
Hch 16:31 Ellos dijeron: –Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú y tu casa.
Hch 16:32 Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.
Hch 16:33 Él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas, y en seguida se bautizó con todos los suyos.
Desde una óptica familiar, podemos darnos cuenta que aquel CARCELERO, era un padre de familia, QUE SU TRABAJO ERA CUIDAR PRESOS.
No veamos solamente su ocupación secular, sino note usted que también era un cuidador de presos en su casa, que Dios los hizo libres cuando El decidió volverse a Cristo.
Así hay hogares, que necesitan que los papás entreguen su vida a Cristo para que entonces los hijos también salgan de sus cárceles. Como vimos la Biblia dice:
Hch 16:31 Ellos dijeron: –Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú y tu casa.
En este tema el punto principal es darnos cuenta la función tan importante que tenemos los pápás, a quienes Dios nos ha dado potestad para decir que entra y que no entra a nuestros hogares.
Para poder hacer bien esta función, veremos en este pasaje como nos fortalecemos para poder hacer frente a cualquier ataque o contaminación que quiera entrar a nuestra casa:
Luc 11:21 Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su casa, la propiedad está segura;
Luc 11:22 pero si otro más fuerte que él llega y le vence, entonces le quita las armas en las que confiaba y reparte como botín todos sus bienes.
Generalmente este pasaje se asocia al enemigo como el hombre fuerte, pero desde esta óptica veamos que el hombre fuerte (en un buen sentido) debemos ser los padres de familia, que si somos fuertes en Dios y nos armamos con las armas de Dios, no podremos ser vencidos y lograremos defender bien nuestra familia.
El versículo nos da varias claves, por ejemplo:
Luc 11:21 »Mientras el hombre fuerte y armado...
a) Hay que ser fuertes. ¿Cómo? la Biblia dice:
Deu 8:11 »Cuídate de no olvidarte de Jehová, tu Dios, para cumplir los mandamientos, decretos y estatutos que yo te ordeno hoy;
Deu 8:17 y digas en tu corazón: “Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza”;
Deu 8:18 sino acuérdate de Jehová, tu Dios, porque él es quien te da el poder para adquirir las riquezas, a fin de confirmar el pacto que juró a tus padres, como lo hace hoy.
Lo primero es que conozcamos y apliquemos los mandamientos, preceptos y estatutos que nos enseña la palabra de Dios.
Lo segundo es que no se nos olvide que lo que podamos ser o tener es por gracia de Dios, por que El es quien nos da el poder para adquirir riquezas, y no hablamos primeramente de lo terrenal, aunque como hemos dicho, cuando hay prosperidad espiritual, viene prosperidad material.
Pro 24:10 Si flaqueas en día de adversidad, tu fuerza quedará reducida.
Para que tengamos fuerza, NO PODEMOS FLAQUEAR cuando haya adversidad, no podemos dejar de llenarnos de Dios porque si no nos debilitamos y por tanto dejaríamos de ser el padre fuerte que necesitan nuestras familias, dice la Biblia:
Pro 24:12 Porque si dices: «Lo cierto es que no lo supimos», ¿acaso no lo considerará el que pesa los corazones? El que mira por tu alma, él lo conocerá, y él pagará al hombre según sus obras.
En momentos de angustia o de adversidad algunso flaquean y resbalan excusandose con cualquier cosa, pero Dios que pesa el corazón sabe cuando es cierto y cuando una excusa.
Pro 31:3 No des tu fuerza a las mujeres, ni tus caminos a las que destruyen a los reyes.
Una papá que cae en adulterio pierde su fuerza y por eso muchas veces el diablo saqueada su casa, dice el proverbio 5:
Pro 5:3 Los labios de la mujer extraña destilan miel y su paladar es más suave que el aceite,
Pro 5:4 pero su final es amargo como el ajenjo, agudo como espada de dos filos.
Pro 5:8 Aleja de ella tu camino y no te acerques a la puerta de su casa,
Pro 5:9 no sea que des tu honor a extraños, y tus años a alguien cruel;
Pro 5:10 o no sea que los extraños se sacien de tu fuerza, que tus trabajos queden en casa ajena…
Los extraños y el cruel es el diablo y sus secuaces, que hacen estragos cuando EL QUE DEBE CUIDAR SU CASA les abre las puertas para que lo deshonren y lo que quizás por años consiguio con esfuerzo otro se lo disfrute. Meterse con mujer extraña debilita, pero tener intimidad con la esposa fortalece:
Sal 19:5 y éste, como un esposo que sale de su alcoba, se regocija cual hombre fuerte al correr su carrera.
Recuerde que el gozo y la alegría dan fuerza. El disfrutar del cónyuge en santidad es una bendición que da alegría y por tanto fuerza. El libro de lucas nos hablaba de otro elemento para estar fuerte:
ARMARCE:
2Co 10:3 Aunque andamos en la carne, no militamos según la carne,
2Co 10:4 porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas...
Efe 6:10 La armadura de Dios
Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor y en su fuerza poderosa.
Efe 6:11 Vestíos de toda la armadura de Dios,[i] para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo,
Efe 6:13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo y, habiendo acabado todo,[l] estar firmes.
Efe 6:14 Estad, pues, firmes, ceñida vuestra cintura con la verdad, vestidos con la coraza de justicia
Un arma que da fuerza es la verdad, EL DEJAR DE SER MENTIROSO, DA FUERZA EN LA CINTURA PARA PODER BATALLAR.
Otra arma es la coraza de justicia, esto significa que aquel que actua justamente todo su pecho estará protegido contra cualquier ataque.
Efe 6:15 y calzados los pies con el celo por anunciar el evangelio de la paz.
Cuando un padre de familia habla del evangelio de Cristo, Y LO HACE BUSCANDO LA PAZ, su caminar está protegido y por eso el lugar que pise será lugar que Dios bendice.
Efe 6:16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.
La fe es un creer pero con actuar, y su fuente es oír el rhema de Dios, entre más oiga rhema, tendrá más fe y por tanto tendrá más poder para apagar los dardos del diablo y también para atacar (el escudo en la antigüedad no solo protegía en determinados momentos se convertía también en un arma).
Efe 6:17 Tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios.
Si nuestros pensamientos son de salvación, es decir de Jeshua que significa salvación, entonces no dudadermos que siempre nosotros y nuestra casa saldremos bien.
La espada es la Palabra de Dios, entre más la conozcas y la uses serás más poderoso para defender tu casa.
Pro 24:5 El hombre sabio es fuerte, y el hombre de conocimiento aumenta su poder.
La verdadera sabiduría proviene de Dios, así que conocer más y más de Dios, trae sabiduría, pero vea que no es únicamente esto, Dios mismo dice que HAY QUE BUSCAR EL CONOCIMIENTO QUE EN OTRAS VERSIONES DICE CIENCIA.
Sintetizando lo que significa es: "busca llenarte de las cosas de Dios pero esfuérzate por adquirir el conocimiento secular porque eso aumentará tu poder.
Mat 12:29 pues ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte y saquear sus bienes, si primero no lo ata? Entonces podrá saquear su casa.
Cuando un padre de familia está atado, se debilita y por tanto con facilidad entrará el enemigo a saquear su casa:
Desatarnos de qué:
Job 39:5 »¿Quién dio libertad al asno montés? ¿Quién soltó sus ataduras?
El asno es un animal de trabajo, pero en este caso tipifica aquellos casos que estan atados porque POR SU MUCHO TRABAJO no buscan de Dios y desatienden a su esposa y a sus hijos.
Lam 1:14 Él ha atado con su mano el yugo de mis rebeliones: ataduras ha echado sobre mi cuello[l] y ha debilitado mis fuerzas.
La rebeldía es una atadura QUE DEBILITA GRANDEMENTE.
Luc 11:21 »Es muy difícil robar en la casa de un hombre fuerte y bien armado.
Luc 11:21 Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su casa, la propiedad está segura;
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