Pastor Luis del Cid 7 de octubre de 2,012 año de la Libertad
Introducción
Así como
dice la Escritura que al aceptar a Cristo recibimos el derecho de llegar a ser
hechos hijos de Dios, de donde entendemos que nuestra salvación debe ser
perfeccionada a través de un proceso, así también el conocer plenamente a Dios
es un proceso:
1Jn 5:20
Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado
entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero,
en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios y la vida eterna.
De allí
que en este tema estudiaremos cómo hacer para conocer al verdadero:
Jer 10:10
Pero Yahveh es el Dios verdadero; es el Dios vivo y el Rey eterno.
Cuando se irrita, tiembla la tierra, y no aguantan las naciones su indignación.
El Dios
verdadero es un Dios que tiene una vivencia con su pueblo, no una relación
ritual o religiosa. El Dios verdadero es rey, esto quiere decir que si lo
conoces necesitas aprender a vivir según las normas de su gobierno. El Dios
verdadero se irrita y lo demuestra, pero solo los que le conocemos aguantamos
cuando El nos corrige:
Rom 3:5 Pero si nuestra injusticia realza la justicia
de Dios, ¿qué diremos? ¿Será acaso injusto Dios al descargar su ira? (Hablo en
términos humanos.)
Sal 30:5 porque por un momento será su ira, pero su
favor dura toda la vida. Por la noche durará el lloro y a la mañana vendrá la
alegría.
El Dios
verdadero es Espíritu y a través de las cosas espirituales se le conoce a El:
Jua 4:24 Dios es espíritu, y los que adoran, deben
adorar en espíritu y verdad.»
Luc 16:9 «Yo os digo: Haceos amigos con el Dinero
injusto, para que, cuando llegue a faltar, os reciban en las eternas moradas.
Luc 16:10 El que es fiel en lo mínimo, lo es también en
lo mucho; y el que es injusto en lo mínimo, también lo es en lo mucho.
Luc 16:11 Si, pues, no fuisteis fieles en el Dinero
injusto, ¿quién os confiará lo verdadero?
Conocer
al Dios verdadero significa conocer las cosas que son espirituales pero para
conocerlas hay que ser fiel con las cosas que son materiales. La fidelidad se
prueba según das lo que tienes que dar y cómo lo das:
1Ti 5:8 Si alguien no tiene cuidado de los suyos,
principalmente de sus familiares, ha renegado de la fe y es peor que un infiel.
Jua 7:16 Jesús entonces les respondió y dijo: Mi
enseñanza no es mía, sino del que me envió.
Jua 7:17 Si alguien quiere hacer su voluntad, sabrá si
mi enseñanza es de Dios o si hablo de mí mismo.
Jua 7:18 El que habla de sí mismo busca su propia gloria;
pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero y no hay
injusticia en El.
Para conocer al verdadero se
necesita hacer su obra pero para lograrlo hay que ser enviado, porque el
enviado no busca su propia gloria sino la del que le envió y entonces así se
logra alcanzar lo verdadero.
Jua 17:3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a
ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
Para
conocer al Dios verdadero hay que conocer a Jesucristo y una forma es a través
de la santa Cena:
Jua 6:32 Y Jesús les dijo: –De cierto, de cierto os
digo: Moisés no os dio el pan del cielo, pero mi Padre os da el verdadero pan
del cielo,
Jua 6:35…Yo soy el pan de vida. El
que a mí viene nunca tendrá hambre, y el que en mí cree no tendrá sed
jamás.
·
Comer el pan significa venir a Cristo.
·
Beber el vino significa creer a Cristo.
·
Venir y creer a Cristo es conocerlo.
EL PAN = VENIR
Mat 11:28 Vengan a mí todos ustedes que están cansados
de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar.
Mat 11:29 Acepten el yugo que les pongo, y aprendan de
mí, que soy paciente y de corazón humilde; así encontrarán descanso.
Mat 11:30 Porque el yugo que les pongo y la carga que
les doy a llevar son ligeros.”
Cuando
nos sentimos cansados de las ocupaciones diarias pero en lugar de apartarnos
buscamos más de Dios y tomamos responsabilidades en el reino, lo que logramos
es entrar a su reposo y lo más bello conocerlo a El.
2Cr 30:8 Ahora, pues, no seáis tercos como vuestros
padres; someteos a Jehová y venid a su santuario, el cual él ha santificado
para siempre; y servid a Jehová, vuestro Dios, y el ardor de su ira se apartará
de vosotros.
Gén 45:18 tomad a vuestro padre y a vuestras familias y
venid a mí, porque yo os daré lo bueno de la tierra de Egipto y comeréis de la
abundancia de la tierra”.
Gén 45:20 No se preocupen por las cosas
que dejan allá, pues lo mejor de Egipto será para ustedes.
Sal 95:1 ¡Venid, aclamemos alegremente a Jehová!
¡Cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación!
Sal 95:2 ¡Lleguemos ante su presencia con alabanza!
¡Aclamémoslo con cánticos!,
Sal 95:6 Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos
delante de Jehová, nuestro hacedor,
Sal 95:7 porque él es nuestro Dios; nosotros, el
pueblo de su prado y ovejas de su mano...
Sal 96:8 Dad a Jehová la honra debida a su nombre;
traed ofrendas y venid a sus atrios.
Isa 1:18 »Venid luego, dice Jehová, y estemos a
cuenta: aunque vuestros pecados sean como la grana, como la nieve serán
emblanquecidos; aunque sean rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca
lana.
Isa 55:1 «¡Venid, todos los sedientos, venid a las
aguas! Aunque no tengáis dinero, ¡venid,
comprad y comed! ¡Venid, comprad sin
dinero y sin pagar, vino y leche!
Jer 51:10 Jehová sacó a luz nuestras justicias; venid y
contemos en Sión la obra de Jehová, nuestro Dios.
Ose 6:1 Venid y volvamos a Jehová,
pues él nos destrozó, más nos curará; nos hirió, más nos vendará.
Si te fue
mal, si fue necesario un azote para enseñarte o corregirte, no te alejes de
Dios, ven a El y deja que te cure y vende porque así podrás conocer más al
verdadero.
Mat 22:4 Volvió a enviar otros siervos con este
encargo: “Decid a los invitados que ya he preparado mi comida. He hecho matar
mis toros y mis animales engordados, y todo está dispuesto; venid a la boda”.
Apo 19:17 Vi un ángel que estaba de pie en el sol, y
clamó a gran voz diciendo a todas las aves que vuelan en medio del cielo: ¡Venid
y congregaos a la gran cena de Dios!
CREER ES BEBER
Mar 5:36 Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía,
dijo al alto dignatario de la sinagoga: –No temas, cree solamente.
Mar 11:22 Respondiendo Jesús, les dijo: –Tened fe en
Dios.
Mar 11:23 De cierto os digo que cualquiera que diga a
este monte: “Quítate y arrójate en el mar”, y no duda en su corazón, sino que
cree que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.
Mar 11:24 Por tanto, os digo que todo lo que pidáis
orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.
Jua 7:38 El que cree en mí, como dice la Escritura, de
su interior brotarán ríos de agua viva.
Jua7:39 Esto dijo del Espíritu que
habían de recibir los que creyeran en él, pues aún no había venido el Espíritu
Santo, porque Jesús no había sido aún glorificado.
Jua 12:46 Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo
aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.
Rom 10:11 La Escritura dice: «Todo aquel que en él
cree, no será defraudado»,
Cuando
venimos a Dios (es decir hacemos lo que la Palabra dice) y creemos como El dice
que creamos, participamos completamente de la Cena del Señor lo cual nos
permite conocer al verdadero.